SEMANA 15. DEL 30 DE NOVIEMBRE AL 4 DE DICIEMBRE.
ESCUELA SECUNDARIA GENERAL «PAPANTLA»
CICLO ESCOLAR 2020 – 2021
PROFESOR: JOSÉ MANUEL VILLAGÓMEZ REYES
HISTORIA II
Semana 15
Lunes 30 de noviembre.
La
Quemada
Aprendizaje
esperado: Identifica los principales rasgos
culturales del Clásico temprano, así como algunas características de las
culturas más representativas del periodo.
Énfasis: Reconocer a las culturas del Norte
como parte del periodo Clásico y sus principales características.
En esta sesión continuarás con el estudio de las culturas del
Norte como parte del periodo Clásico e identificarás sus principales
características y su ubicación. En esta sesión, te enfocarás en: La Quemada.
LA
QUEMADA, ZACATECAS
Es muy probable que sobre pocos sitios arqueológicos se haya
especulado tanto como sobre La Quemada, Zacatecas; un lugar al que
historiadores y arqueólogos han atribuido, desde el siglo XVIII hasta la
actualidad, diversas funciones y relaciones. Con el patriotismo criollo del
siglo XVIII, en vísperas de la Independencia, se despertó la inquietud sobre
esta monumental ruina a la que se relacionó con el legendario Chicomóztoc, por
donde pasaron los mexicas en su peregrinación rumbo al Anáhuac.
Por su parte, los arqueólogos del siglo XX la han visto como
un enclave teotihuacano, un imperio tolteca, un centro tarasco, un bastión
contra intrusiones chichimecas y la capital de todos los grupos sedentarios al
norte del río Santiago. Ha sido hasta las últimas dos décadas cuando los
trabajos arqueológicos han traído a la luz el papel de La Quemada en el norte
de Mesoamérica durante el periodo Clásico.
Las excavaciones en los tiraderos o basureros prehispánicos
del sitio han revelado que el medio semiárido del valle de Malpaso, donde se
encuentra La Quemada, es producto de más de dos siglos de tala para abastecer
de madera a las haciendas de beneficio de mineral del Zacatecas virreinal. Esos
datos arqueológicos indican que, en lugar de ser una zona seca y relativamente
inhóspita, el valle de Malpaso era, desde por lo menos el siglo IV, propicio
para el asentamiento de numerosas aldeas. La expansión de la llamada “frontera
septentrional” de Mesoamérica, allende el eje Lerma-Santiago, es hasta la fecha
una de las interrogantes más acuciantes para los investigadores de esa amplia
región. Aún no es claro si se trató de una colonización repentina por parte de
grupos sedentarios procedentes del Bajío o si los grupos nómadas, o
seminómadas, adoptaron paulatinamente el modo de vida aldeana de Mesoamérica
durante los primeros siglos de nuestra era. Se sabe que, hacia finales del
siglo V, los habitantes del valle ya edificaban grandes basamentos y, sobre los
costados del cerro, terrazas de mampostería para la construcción de templos y
espacios de uso ceremonial. Durante los siguientes cuatro siglos (ca. 550-950
d. C.), el sitio creció y llegó a tener más de 50 grandes terrazas de uso
ceremonial y habitacional. Del centro ceremonial de La Quemada partían más de
100 km de calzadas hechas de laja que se extendían a lo largo del valle y
enlazaban a más de 220 aldeas, poblados mayores y sitios ceremoniales
secundarios. Esta extensa red de calzadas con sus numerosos sitios asociados
representa un conjunto arqueológico único en Mesoamérica.
Ya que La Quemada fue un sitio ceremonial de características
mesoamericanas, su conjunto monumental funcionó como un paisaje ritual en el
que las distintas estructuras y complejos arquitectónicos eran sede de
importantes ceremonias del ciclo ritual agrícola. Los perfiles de los
horizontes serranos, tanto al oriente como al poniente, fueron utilizados para
marcar los amaneceres y atardeceres correspondientes de los equinoccios, fechas
trascendentales para la recreación de eventos cosmogónicos para los rituales
correspondientes, llevados a cabo, a lo largo del año, en los distintos
conjuntos arquitectónicos que se distribuían sobre el cerro.
Visto de esta manera, lejos de ser monumentos estáticos, los
grandes centros, como La Quemada, eran escenarios en los que los sacerdotes
antiguos reproducían el “drama mítico-cósmico-ritual” relacionado con el ciclo
agrícola que iba de la temporada de secas a la de lluvias, incluyendo las
frágiles transiciones entre ellas.
¿Con los datos que proporciona la lectura, puedes imaginar la
magnitud e importancia de esta zona arqueológica y de las culturas del norte
mesoamericano?
A continuación, lee un breve párrafo del libro “El pasado
indígena”, de Alfredo López Austin y Leonardo López Luján, sobre cómo se
formaron estos pueblos del norte mesoamericano.
“Al inicio de nuestra era hubo un crecimiento nunca antes
visto del territorio mesoamericano, particularmente hacia el norte, sobre una
amplia franja que había sido dominada durante milenios por pueblos
recolectores- cazadores. Los límites fronterizos septentrionales que resultaron
de esta expansión corrían en forma paralela a los confines de la Mesoamérica
del siglo XVI, aunque 250 kms más al norte”.
De acuerdo con esta lectura, puedes darte una idea de cómo se
formaron las culturas que conocerás durante esta sesión. Mesoamérica llegó a
expandirse de tal forma que ocupó territorios que antes eran dominados por
grupos de cazadores-recolectores.
Observa la siguiente imagen de la zona norte de Mesoamérica.
Presta mucha atención a los nombres de los estados en los que se desarrollaron
estas culturas.
De acuerdo con Pedro Armillas, esta franja del norte
comenzaba con la desembocadura del río Pánuco, en el actual estado de
Tamaulipas, continuaba por poblados de los actuales San Luis Potosí, Zacatecas,
Durango y concluía, aproximadamente, en la desembocadura del Río Mayo, en
Sonora.
Ahora, presta atención a la siguiente información, sobre los
nombres de los actuales estados en los que se extendió la franja septentrional
o del norte de Mesoamérica.
Estados en los que se ubicó la franja septentrional de
Mesoamérica:
Río Pánuco, en Tamaulipas,
Poblados de San Luis Potosí, Zacatecas, Durango.
Concluía en la desembocadura del Río Mayo, en Sonora.
Para saber un poco más sobre las culturas del norte
mesoamericano, observa el siguiente video, de la importante y majestuosa zona
de La Quemada, Zacatecas.
Micro Documental La Quemada, Zacatecas, México.
https://www.youtube.com/watch?v=_2SqHqwZm2g
Las zonas arqueológicas del Norte demuestran que no sólo el
centro mesoamericano tuvo una gran relevancia durante el periodo Clásico, sino
que también, zonas como la del Chalchihuites, tuvieron una gran importancia en
las relaciones comerciales con otras culturas mesoamericanas.
A inicios de nuestra era, las zonas mesoamericanas se
extendieron hacia el norte del territorio mesoamericano y ocuparon zonas que
habían sido tradicionalmente habitadas por cazadores-recolectores. Estas
culturas del territorio mesoamericano se instalaron en la zona norte o la
llamada franja septentrional creando grandes asentamientos urbanos.
Para el siglo I de nuestra era se considera ya un área
septentrional de Mesoamérica.
SEPTENTRIONAL:
Del lat. septentrionÄlis.
adj. Perteneciente o relativo al septentrión.
adj. Del norte.
Esta franja del norte que semejaba una letra U, atravesaba la
Mesa Central de oriente a poniente. El área ha sido dividida en tres grandes
zonas: la franja central, el ramal oriental y el ramal occidental.
1.- La franja central, nombrada “El Tunal Grande”, comprendía los
territorios de los actuales estados de Guanajuato, San Luis Potosí, Zacatecas,
Aguascalientes y Jalisco. Los sitios arqueológicos encontrados en esta zona
tuvieron su auge entre el 600 y 900 de nuestra era. Esta zona no alcanzó un
gran desarrollo como los centros mesoamericanos. Se sabe que sus asentamientos
fueron pequeños y carecieron de edificaciones públicas de alta envergadura.
2.- La segunda zona es el ramal oriental y puede subdividirse en
la región del sur de Tamaulipas y en las regiones similares de Río Verde, San
Luis Potosí y de la Sierra Gorda en Querétaro.
En la región tamaulipeca se pueden encontrar sitios como
Balcón de Montezuma y San Antonio Nogalar. Ambas se caracterizaron por
construcciones de tipo aldeanas y entre sus construcciones se localizaron
recipientes y pipas de cerámica, lo cual habla de una relación comercial con
sociedades tanto de la Huasteca como de la cuenca del Mississippi.
Por su parte, las regiones rioverdense y de la Sierra Gorda
tuvieron un desarrollo cultural paralelo debido a que eran zonas próximas y
también a ciertas actividades comunes, como las acumulaciones del cinabrio,
mineral del mercurio color rojizo que era muy cotizado para el uso ritual en
Mesoamérica.
3.- La última de las zonas de las
culturas del norte mesoamericano, fue el ramal occidental. Ha sido catalogada como
la zona más conocida porque allí se desarrolló la famosa Cultura Chalchihuites.
Dicha zona comprende 600 kilómetros a lo largo de los territorios de Durango,
Zacatecas y Jalisco de la Sierra Madre Occidental.
Durante los primeros siglos de nuestra era, en la zona se
desarrollaron pequeñas aldeas agrícolas que también refieren una cierta
igualdad sociopolítica y la inexistencia de grupos con grandes privilegios.
Pero entre los años 300 y 500 de nuestra era se dieron cambios importantes,
como los primeros cultivos en terrazas artificiales regadas por canales. Se
vivió una fuerte explosión demográfica que volvió más complejas a sus
sociedades y la arquitectura de sus asentamientos se transformó.
El crecimiento de las aldeas agrícolas dio paso a lugares
como La Quemada, centro hegemónico de 17 hectáreas, comunicado por una red de
caminos con sus asentamientos satélites.
Como consecuencia de estos cambios, las culturas del norte
florecieron entre el 500 y 900 de nuestra era. Se experimentaron cambios como
la existencia de élites que vivieron de la tributación de productos agrícolas y
del control comercial. Gran parte de sus habitantes se dedicaron a las labores
de construcción de edificios monumentales, de obras defensivas y terrazas de
cultivo. El trabajo colectivo se destinó a la minería.
Ciudades como AltaVista tuvieron un fuerte sistema comercial
que los conectó con centros tan importantes como Teotihuacan, Paquimé y el
Cañón del Chaco.
La región del ramal occidental se puede a su vez dividir en
cuatro subáreas. La región que se extiende desde el Valle de Malpaso hasta el
alto Súchil, alojó a las mayores capitales de La Quemada y AltaVista.
La Quemada ocupa varias terrazas en la cumbre de una colina
protegida por una muralla y acantilados. En la parte sur del centro ceremonial
de La Quemada se edificaron construcciones de carácter público como la Plaza
Principal, la cancha del juego de pelota y la Pirámide Votiva. A dichas zonas
podían acceder todo tipo de personas para observar las distintas ceremonias a
deidades. El segundo, tercero y cuarto nivel de la zona arqueológica
corresponde a las áreas privadas a las que sólo podían acceder sacerdotes,
gobernantes y clase alta. Por ejemplo, en el tercer nivel había una gran plaza
ceremonial privada. Al centro estaba un altar y al norte de la plaza un
basamento piramidal en forma escalonada. Al salir del recinto sagrado por el
costado noreste hay una gran escalinata que conduce a una cancha menor del
juego de pelota. Este sector se encuentra limitado por una muralla de tres
metros de largo y ancho que protege esta parte de la ciudad.
En la construcción de la zona de La Quemada, Zacatecas, se
utilizó un complejo sistema de planeación arquitectónica en el que se usaban
orientaciones astronómicas exactas.
Investigaciones recientes han demostrado que los puntos entre
sus edificios, en tanto a longitud como de área, correspondieron a los periodos
del calendario mesoamericano. Lo más destacado de estos trazos es que la
construcción de esta ciudad tenía implicaciones religiosas, cosmológicas y
sociopolíticas.
Ahora, observa el siguiente video a manera de resumen. Presta
mucha atención, pues el video sólo contiene información escrita.
LA QUEMADA,
ZACATECAS.
https://www.youtube.com/watch?v=fQqHdcYZzIM
A manera de cierre, recapitula. En esta sesión pudiste
observar algunas características de los pueblos del norte mesoamericano. Ahora
sabes que a esta población se le conoce como la franja septentrional de
Mesoamérica y que estos grupos mesoamericanos se ubicaron en partes de los
actuales estados de Tamaulipas, San Luis Potosí, Zacatecas, Durango y llegaron
hasta el Río Mayo en Sonora. Se dividieron en tres franjas: Franja central,
ramal oriental y ramal occidental y que dentro de esta última se ubicó la ciudad
mesoamericana de La Quemada. Además, conociste que las culturas del ramal
occidental fueron grandes comerciantes y que comerciaron con lugares tan
importantes como Teotihuacan y Paquimé. La zona de La Quemada es una zona
ritual de características mesoamericanas, como el juego de pelota y la
ubicación de sus edificios orientados astronómicamente.
Si quieres conocer más de este tema, puedes consultar tu
libro de texto de Historia.
SEMANA 15
Miércoles 02 de diciembre.
LOS MAYAS, PERSONAS DE LA SELVA
Aprendizaje esperado: Conoce
los principales rasgos del Clásico tardío; también podrá identificar y comparar
la vida de algunas de las principales culturas de esa época.
Énfasis: Reconocer a la
cultura maya como representativa del periodo Clásico tardío y sus principales
características: actividades económicas, políticas, sociales y culturales.
En esta sesión,
profundizarás en la cultura maya y explorarás los aspectos más relevantes de
ella, como sus principales actividades económicas, políticas, culturales y
sociales. Además, conocerás el espacio geográfico en donde se desarrolló esta
cultura y su avanzado progreso en las matemáticas, escritura, pintura,
arquitectura, entre otros.
El mundo Maya
El espacio geográfico en que
se desarrolló la cultura maya es amplio y diverso, este territorio de más de
350 mil kilómetros cuadrados alberga una cantidad considerable de vestigios
arqueológicos y una de las comunidades biológicas más ricas del planeta.
[…] Las tierras altas
situadas en el extremo sur hacia las montañas de Guatemala y Chiapas, se
distinguen por su elevada topografía y porque marcan el límite sur en la
distribución de ciertos rasgos culturales distintivos de la civilización maya
del Clásico. Esta zona fue y es habitada por grupos de habla maya, y proveía a
las tierras bajas de algunos productos no disponibles en ellas. La producción
agrícola fue amplia y diversa; su origen volcánico determina la existencia de
importantes recursos minerales como la piedra con que se elaboran los metales,
depósitos de obsidiana, preciada materia prima para la fabricación de
herramientas cortantes e, incluso, objetos de culto o suntuarios, también jade
que no sólo fue un símbolo de riqueza y posición social, sino un mineral con
connotaciones religiosas y rituales. Sin duda, entre los productos más
estimados de esta región se encuentran las plumas de quetzal, ave que sólo vive
en ciertas partes de gran elevación de los altos de Guatemala y áreas
adyacentes.
Las tierras bajas se
componen de dos grandes zonas con notables diferencias en cuanto a hidrología,
vegetación, relieve y distribución de sus habitantes. Las Tierras Bajas del Sur
fueron el asiento de las más grandes ciudades mayas del Periodo Clásico. La
extensión de la Selva en las tierras Bajas mayas era mucho mayor ahora que la
que debe haber tenido en el Periodo prehispánico. En ese entonces, la población
era notablemente más amplia y existía una considerable cantidad de poblados
distribuidos por toda la región, lo que implica una reducción de la cubierta
vegetal.
[…] La hidrografía en las
Tierras Bajas del Sur es rica, todos los grandes y extensos ríos superficiales
de las Tierras Bajas mayas se hallan aquí. El más destacado es el Usumacinta
[…]. Seguramente las corrientes fluviales de la zona, además de proveer del
vital líquido a las comunidades mayas, fueron utilizadas como un importante
medio de comunicación en favor del intercambio comercial hacia dentro y fuera
de la región. En la zona existen, además, varios lagos, entre ellos, el
Petén-Itzá, donde se localiza la isla de Tayasal, último lugar maya conquistado
por los españoles a fines del siglo XVII.
Las tierras Bajas del Norte
comprenden la península de Yucatán [donde] los rasgos más prominentes del
paisaje lo constituyen los antiguos edificios mayas. La diferencia más notable
de esta zona con respecto a las zonas del Sur es la disponibilidad de agua
dulce. Aquí con excepción de algunos lagos en el oriente, prácticamente no
existen mantos de agua en la superficie, pero se encuentran grandes pozos
naturales llamados cenotes. Éstos siempre han sido un factor determinante en la
ubicación de los pobladores de la región, y tenían para los antiguos mayas una
importante connotación religiosa, como lo muestran las ceremonias de dedicación
y sacrificio que se realizaban en el cenote sagrado de Chichén Itzá […] Esta
preocupación constante por el vital líquido explica la dedicación a los Dioses
de la lluvia y el agua, por ejemplo Cháac, tan difundida en la península, como
se observa en lugares como Balám-kanché y Loltún […].
Además, encontramos ya un
incipiente sistema de escritura jeroglífica y otro relacionado para la notación
y registro del tiempo. Durante esta época se consolidan las formas religiosas y
rituales que prevalecerán hasta la evangelización cristiana. Son notables los
grandes basamentos denotados con mascarones en estuco, cuyo arreglo semeja el
movimiento celeste, como en cerros,
[…] La zona maya forma parte
de Mesoamérica, extenso territorio habitado en la época prehispánica por
sociedades que compartían determinados rasgos culturales, si bien, cada una
poseía características propias. Los mayas mantuvieron vínculos de diversa
índole con esos grupos; lo mismo se encuentran elementos teotihuacanos en
grandes metrópolis mayas como Tikal y rasgos toltecas en lugares como Chichén
Itzá, que aspectos mayas en importantes ciudades mesoamericanas como
Xochicalco, Cacaxtla o Monte Albán.
En el preclásico superior
(200 a.C. a 250 d.C.) surgen y se desarrollan buena parte de los rasgos
culturales que, en adelante, caracterizarán a los mayas. Uno de los elementos
distintivos de este periodo es el fuerte aumento poblacional claramente expresado
en torno a grandes complejos arquitectónicos, varios de ellos ya conformados
por estructuras verdaderamente monumentales, como es el caso de Lamanai, Belice
y, principalmente, El mirador en Guatemala, antecedente de los centros urbanos
y políticos de la cultura maya durante el Clásico.
En Belice y en Uaxactún,
Guatemala. También en esta época, la religión y el ritual ocupan un importante
papel en la configuración del sistema social y económico, así como en la
legitimación de la estructura política, y se denota en elementos como el culto
a la fertilidad, vinculado a la promoción de las condiciones que permitieran
una buena productividad agrícola y el culto a los muertos. Ya entonces se
observan prácticas funerarias con distintos grados de sofisticación, en razón
directa de la posición de cada individuo en la sociedad.
Todas estas pautas de
desarrollo se consolidan, y en varios casos alcanzan su mejor expresión,
durante el periodo Clásico (250-900 d. C.). Éste es la suma de elementos
característicos, manifestaciones culturales y artísticas, cuya calidad y
magnitud lo hacen el periodo de mayor esplendor de la civilización maya.
Las Tierras Bajas
(principalmente las del sur) son claramente definibles por un conjunto de
rasgos culturales, como una escritura jeroglífica, de tal complejidad que
apenas ahora se avanza en su desciframiento; calendarios ritual y astronómico,
de una extraordinaria precisión y cobertura; una concepción arquitectónica
particular, cuyo elemento fundamental lo constituye el principio del arco falso
(también llamado bóveda maya); grandes centros cívico-ceremoniales conformados
por basamentos y plataformas, frecuentemente de proporciones monumentales,
dispuestos en torno de plazas; monumentos escultóricos de diversos tipos, levantados
con el propósito de registrar no solamente fenómenos cósmicos y el paso del
tiempo, sino también con gran claridad la historia de cada ciudad y de los
protagonistas principales, en ocasiones conformando verdaderos árboles
genealógicos de las dinastías reinantes.
El texto anterior, ayuda a
establecer, entre otras cosas, dos cuestiones.
Primero, la
ubicación temporal de los mayas: que puede situarse en el periodo preclásico
(particularmente del 800 a.n.e. al 200 n.e.), en el periodo Clásico (200-900
n.e.), así como el periodo Posclásico (900 a 1521).
La segunda cuestión
brindada por el texto es la referente a la ubicación geográfica de los mayas:
donde se pueden notar dos grandes regiones denominadas: las tierras altas y las
tierras bajas principalmente.
Estas dos grandes regiones a
su vez pueden subdividirse en:
La costa y piedemonte del
pacífico.
Las tierras altas
del sur.
Las tierras altas
del norte.
Las tierras bajas
del sur.
Las tierras bajas
del centro.
Las tierras bajas
del norte.
Para conocer más sobre la
cultura maya, observa el siguiente video.
LOS MAYAS EN DIBUJOS ANIMADOS.
https://www.youtube.com/watch?v=mrTzjGYHJxI
La civilización maya se
desarrolló desde el periodo Preclásico, pero vio su máximo esplendor en el
periodo Clásico, convirtiéndose en un referente del periodo junto con teotihuacanos
y zapotecas. Los mayas fueron y han sido una de las civilizaciones más
importantes del sureste de nuestro país, así como de Centroamérica, de la cual
han existido diversos estudios que han analizado su complejidad social y
cultural.
Los mayas en realidad no
sólo son una cultura sino una serie de pueblos que tienen en común diferentes
lenguas provenientes del tronco mayense.
Los pueblos de habla maya se distinguen entre sí por tiempo, espacio y
cultura y es por ello que para su estudio se han establecido hasta el momento
las 6 regiones que viste anteriormente.
Para comprender mejor los
periodos en que se desarrollaron los mayas, observa la siguiente línea del
tiempo:
Se puede observar que, en el
periodo preclásico medio, particularmente desde el 800 a.n.e., ya existían
centros urbanos de grandes dimensiones, como lo demuestran las investigaciones
dadas a conocer en junio de 2020 sobre el sitio Aguada Fénix, consistente en
una gran plataforma elevada entre 10 y 15 metros, que se extiende 1.4
kilómetros de norte a sur.
Otros sitios de gran
importancia del preclásico maya son los sitios de Nakbé y El Mirador en
Guatemala, este último fue una gran ciudad que, para la época, se constituyó
como uno de los centros urbanos más imponentes de Mesoamérica. Destaca, sobre
todo en El Mirador, la pirámide Danta, con una altura de 72 metros y una base
de 330 m y 280 m en su plataforma.
En el Clásico surgen las
ciudades más conocidas del área, por lo que esta época se considera como la de
mayor esplendor maya. El clásico entre los mayas presenta dos momentos
históricos muy marcados. El primero corresponde al del clásico temprano (250- 600
a.n.e.), donde se puede notar la influencia teotihuacana en la zona, sobre todo
en la ciudad de Tikal, sitio que incluso llegó a tener relaciones dinásticas
con uno de los hijos del gobernante de Teotihuacan denominado “Búho lanza
dardos”.
El segundo momento del
clásico maya es el clásico terminal (600-900 n.e.) en donde se consolidaron
enormes Ciudades-Estado que dominaban a otras más pequeñas mediante la guerra,
algo usual entre los mayas. Destaca sobre todo la rivalidad entre las dinastías
de Calakmul contra las de Tikal, siendo esta última la vencedora hacia el año
695.
También son importantes en
este periodo las rivalidades entre la ciudad de Palenque contra Toniná.
Hacia el final del clásico
terminal, fueron abandonándose las ciudades mayas debido a escasez de alimentos
derivados de sequías y otras catástrofes naturales que dieron paso al
denominado “colapso maya”, lo cual no debe imaginarse como la desaparición
total de los pueblos de habla maya, sino más bien de su migración y asentamientos
mayoritariamente a las tierras bajas del norte en la actual península de
Yucatán.
El periodo Posclásico será
el momento en el que los mayas tendrán como ciudades importantes a la
monumental Chichén Itzá, la cual contó con la influencia de culturas del centro
de México, en específico de grupos toltecas, quienes traerían a la región el
culto a la serpiente emplumada denominada Kukulcán en lengua maya yucateca.
Hacia el año 987, Chichén Itzá formó parte de la liga de Mayapán, integrada por
estas dos ciudades, además de Uxmal. El poderío de Chichén culminaría hacia el
año 1250 aproximadamente y, para este tiempo, existieron una diversidad de
ciudades costeras en el norte de Yucatán y la costa de Quintana Roo, entre las
que destaca la ciudad de Tulúm, Xelhá, Xcaret, entre otras. Estos últimos
pueblos mayas, además de los grupos chontales de Tabasco, serían los que
establecerían los primeros contactos con los españoles.
A diferencia de otros
pueblos mesoamericanos, los mayas fueron de los últimos en ser conquistados,
por lo que la existencia de pueblos de habla maya en la región de Guatemala se
extendió hasta el año 1697 con la conquista de la ciudad de Tayasal, último
reducto de los mayas prehispánicos.
Para saber cómo vivían los
mayas, observa el siguiente video, que habla de los aspectos económicos,
políticos, sociales y culturales de esta enorme civilización.
LA CULTURA MAYA.
https://www.youtube.com/watch?v=hjEQd-SXLdY
Retoma algunos de los
ámbitos mencionados en el video para detallar algunas particularidades de los
mayas:
Ámbito Social
En el ámbito social, los
mayas vivieron una fuerte estratificación representada por las clases
privilegiadas y las no privilegiadas. Las primeras estaban representadas por
una clase sacerdotal y noble entre las que destacaba la figura del Halach Uinik
o también llamada Ajaw, quien era el gobernante más importante de una ciudad
maya. También formaban parte de esta clase los guerreros de alto rango, los
sacerdotes y sus familias.
Las clases no privilegiadas
las conformaban guerreros de bajo rango, comerciantes, artesanos y campesinos.
Al final de la pirámide social se hallaban los cautivos de guerra y esclavos.
La mayoría de los no privilegiados vivían en los alrededores de los centros
ceremoniales.
Ámbito económico
Los mayas se concentraron en
la práctica de la agricultura, principalmente maíz, frijol, chile y cacao. La
agricultura se realizaba con la técnica de roza y quema en la que se aprovecha
una zona de la vegetación, a la cual, una vez talada y preparada, se le prendía
fuego para después sembrar en ella. La dieta basada en la agricultura se
complementaba con la caza de animales como el venado y la pesca en ríos y mares.
Otras actividades fueron el comercio, particularmente las piedras verdes, que
unía a ciudades con otras por medio de grandes caminos llamados Sacbé, así como
también la práctica de la alfarería y la guerra. Esta última con el fin de
controlar rutas comerciales y demostrar el poderío de una ciudad y sus aliados,
lo que se conocía como Cuchcabal.
Ámbito político
Por su parte, en el ámbito
político, los mayas tenían como gobernantes supremos al Halach Unik o Ajaw, los
cuales no sólo tenían función de gobernantes sino también de sacerdotes y
guerreros. Es por ello que este sistema se denomina Teocracia, pues la religión
fue factor fundamental en la justificación del poder. Se han encontrado tumbas
de gobernantes con una gran variedad de objetos funerarios, así como
representados en pintura mural, estelas y figurillas. La mayoría de ellos
formaban dinastías, como la de la serpiente o Kaan en Calakmul o la dinastía
Mutul en Tikal.
Ámbito cultural
Los mayas cuentan con
amplios ejemplos del ámbito cultural. En primer lugar, destaca su arquitectura
monumental de la cual existen diversos estilos (como el Puuc o río Bec) siendo
el arco falso su principal hallazgo, como el elaborado en la ciudad maya de
Labná. Sus esculturas pueden observarse en relieves, así como en estelas, de
las cuales los especialistas denominados “mayistas” han podido reconstruir gran
parte de su historia a través de la traducción de los glifos representados en
ellos. Los mayas fueron excepcionales artistas en cuanto a pintura mural, como
las halladas en la ciudad de Bonampak, Chiapas, en las cuales la figura humana
aparece de forma realista.
En cuanto a su cerámica,
esta era decorada con pinturas de diferentes colores, por ello recibe el nombre
de cerámica polícroma.
Los mayas creían en la
existencia de tres planos para entender al universo, el plano celestial
conformado por 13 cielos, siendo el Oxlahún décimo tercero. Un plano terrenal
asociado a un reptil de donde nace la montaña sagrada y el inframundo o mundo
subterráneo conformado por nueve niveles llamado Xib’alb’a.
En estos tres planos la
participación de los dioses fue muy importante: siendo Chaac (dios de la
lluvia), Kinich Ahau (dios del sol), Kukulcán (serpiente emplumada) e Ixchel
(diosa lunar) los más destacados.
Un aspecto particularmente
interesante de los mayas fue su avanzado desarrollo de las matemáticas, que les
permitió anotar sus observaciones del cielo, lo que los convierte en grandes
astrónomos de la antigüedad.
Cabe resaltar que entre los
mayas el sistema numérico era el vigesimal, utilizando el símbolo punto para la
unidad, la barra para el 5 y la concha para representar al cero, idea que fue
desarrollada por primera vez por esta civilización.
Los mayas también son
reconocidos por crear un sistema de escritura basada en glifos, los cuales
pueden observarse en estelas, cerámica pintada y en los códices. Gracias al
esfuerzo de los epigrafistas, especialistas que han investigado en la
traducción de estos glifos, se puede saber de la existencia de tres
calendarios:
El solar de 365 días
El ritual de 260
El de la cuenta larga, cuyo
inicio se estableció en el año 3114 a.n.e. y de la que en 2012 se reinició el
ciclo de 5125 años.
En cuanto a los códices
mayas, se puede decir que estos eran elaborados en piel de venado o papel
amate, donde los mayas realizaban anotaciones sobre los movimientos
astronómicos, cosmovisión y sus principales dioses. Los nombres de algunos
códices que se han logrado resguardar son, el Códice de Dresde, Códice Madrid,
Códice de París y, el más antiguo de todos ellos, el Códice Maya de México, del
que observarás en el siguiente video.
CÓDICE MAYA DE MÉXICO.
https://www.youtube.com/watch?v=82lPKS5SQc4
En esta sesión, descubriste
los aspectos más relevantes de la cultura maya. Los más importantes son:
Los mayas se establecieron
en la región sureste de México y parte de Centroamérica y para su estudio se ha
dividido la zona en 6 regiones.
La presencia de los mayas en
Mesoamérica puede rastrearse desde el periodo preclásico, aunque el clásico fue
el periodo de su mayor esplendor. También vivieron durante el posclásico y
parte del periodo colonial hasta la caída de la ciudad de Tayasal en 1697.
Las sociedades mayas eran
altamente jerarquizadas y la mayoría de las personas vivían alrededor de los
centros ceremoniales.
La economía maya
giraba en torno a la agricultura, comercio del jade, alfarería y la guerra.
La política entre
los mayas era teocrática, donde el gobernante también tenía funciones de
sacerdote y se denominaba Halach Uinik o Ajaw.
Los aspectos
culturales de los mayas son numerosos, siendo su arquitectura,
pintura, escultura, cosmovisión, astronomía, matemáticas, escritura y
elaboración de códices lo más relevante de su historia.
Si quieres saber más sobre
esta fascinante cultura, puedes consultar tu libro de texto de Historia.
ACTIVIDADES SEMANA 15
INSTRUCCIONES
1. Reproduce
en tu libreta el siguiente mapa de las
tierras altas y las tierras bajas de las 6 regiones Mayas.
1. La costa y piedemonte del pacífico.
2. Las tierras altas del sur.
3. Las tierras altas del norte.
4. Las tierras bajas del sur.
5. Las tierras bajas del centro.
6. Las tierras bajas del norte.
2. Menciona las características de las siguientes regiones y áreas Mayas.
1. La costa y piedemonte del pacífico.
2. Las tierras altas del sur.
3. Las tierras altas del norte.
4. Las tierras bajas del sur.
5. Las tierras bajas del centro.
6. Las tierras bajas del norte.
Con la
información del texto del día miércoles, completa el siguiente cuadro:
3. Con la
información del video de la cultura Maya
y el texto de los ámbitos de estudio de
los Mayas responde en tu
libreta lo que se solicita en el siguiente cuadro.
Recuerda
que las actividades de cada semana se comparten los días viernes y se
tienen seis días para realizar la entrega de forma puntual.
Recuerda realizar solo una entrega semanal antes del JUEVES 10 de diciembre.
¡Buen trabajo!
Gracias por tu esfuerzo
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