LA CONQUISTA DE TENOCHTITLAN
ESCUELA SECUNDARIA GENERAL «PAPANTLA»
PROFESOR: JOSÉ MANUEL VILLAGÓMEZ REYES
HISTORIA II
LA CONQUISTA DE TENOCHTITLAN
PDA: Conoce los procesos históricos más importantes desde el
periodo Posclásico del México antiguo, el desarrollo de la Conquista, hasta el
establecimiento y consolidación del virreinato de la Nueva España.
Énfasis:
Identificar de forma general el periodo Posclásico, la Conquista y la
consolidación del virreinato de la Nueva España.
Estudiarás el siguiente
periodo correspondiente al México antiguo, el
Posclásico. Para ello, conocerás culturas cómo la tolteca, la totonaca,
la tlaxcalteca y la mexica. Asimismo, identificarás de
manera general, el proceso de la Conquista hasta la consolidación del
Virreinato de la Nueva España.
Para iniciar, lee un breve
fragmento del texto “El México antiguo” con el que el autor, Pablo Escalante
Gonzalbo, cierra este periodo para dar paso a la Época colonial. Este texto se
puede consultar en el libro “Nueva historia mínima de México”.
EL MÉXICO ANTIGUO
Los totonacos vieron
en [Hernán] Cortés un aliado aceptable para sacudirse el dominio mexica, y
sería un disparate reprocharles esa alianza, pues no tenían modo de saber, por
ejemplo, que después vendrían la viruela, la tosferina y el tifo, y que sus
ciudades quedarían desiertas y sus milpas y huertas se convertirían con el paso
del tiempo en pastizales.
Los tlaxcaltecas cesaron
su resistencia inicial y optaron por aliarse a los españoles porque les pareció
que esa alianza garantizaría, precisamente, la integridad de su territorio;
ellos no debían lealtad alguna a los mexicas, más bien todo lo contrario, eran
sus enemigos.
Desde el arribo de [Hernán]
Cortés a Yucatán hasta la conclusión del sitio de Tlatelolco con la captura de
Cuauhtémoc, hubo muchos señoríos que, tras ser derrotados en combate o después
de haber celebrado un acuerdo con Cortés, se sumaron a sus filas.
La conquista de Tenochtitlan
fue una victoria de los tlaxcaltecas, de los tetzcocanos, de los totonacos y de
muchos otros grupos indígenas: fue la última guerra del México prehispánico,
dirigida sin embargo por un pequeño ejército que no pertenecía a esa historia.
Con la caída de la capital
mexica los españoles controlaron buena parte de los antiguos territorios
sometidos a la Triple Alianza; en los tres años subsecuentes, con algunas
batallas y numerosos pactos, lograron sujetar a la corona de Castilla incluso
aquellos territorios que se habían mantenido independientes: Michoacán,
Metztitlán, Tututepec, Tehuantepec y varias localidades de los altos de Chiapas
y Guatemala.
La conquista de Yucatán fue
mucho más lenta y quedó inconclusa por cerca de doscientos años; el señorío de
Tayasal, refugiado en el lago Petén-Itzá, no fue sometido sino en 1697. El
dominio y ocupación de la Sierra Madre Occidental y del conjunto de las tierras
situadas al norte de Mesoamérica, pobladas por cazadores recolectores y algunos
agricultores aldeanos, fue una tarea que no concluyó ni siquiera en los tres
siglos de la historia colonial.
Con esta lectura se abre la
puerta a una reflexión en torno a nuestro pasado y a la conformación de las
identidades culturales de nuestro México actual. En ocasiones se piensa en el
pasado indígena como algo que terminó con la llegada de los españoles, quienes
conquistaron a los indígenas y cerraron ese periodo de nuestra historia.
Sin embargo, como se
menciona en la lectura anterior, los españoles no lograron la conquista del
pueblo mexica solos; muchos pueblos indígenas se les sumaron en el proceso. Y
al mismo tiempo, la conquista y el sometimiento de los pueblos indígenas no fue
inmediata.
Tampoco dichos pueblos
desaparecieron de un día para otro, borrando su presencia en nuestra historia.
De hecho, en nuestro presente existen muchísimos pueblos indígenas, los cuales
conservan su lengua, tradiciones e identidad cultural.
No debes olvidar que al
hablar de nuestras raíces estamos hablando de nuestro pasado indígena, pero
también de nuestra raíz española, que llegó con la conquista y se consolidó con
el virreinato español, y que nos ha dado desde el idioma que hablamos la
mayoría de las y los mexicanos, así como muchísimas costumbres y tradiciones,
es decir, somos un pueblo mestizo.
A partir de la
llegada de los españoles se puede dar por terminado el periodo posclásico del
México antiguo. A partir de ese momento, poco a poco, se fue configurando en
nuestro territorio una nueva sociedad, integrada por distintos elementos
culturales, incluso de diversas partes del mundo.
En el periodo de la colonia
también hubo, entre los habitantes de este territorio, personas provenientes
del continente africano, en su caso fueron traídos para trabajos forzados y
empleados como esclavos. También se asentaros grupos de población asiática,
principalmente comerciantes. La mezcla de todos estos grupos y prácticas
culturales, son la base, se encuentran incluidas en la diversidad de
identidades que conformamos México, de ahí la importancia de estudiar este
periodo.
Después de esta breve
introducción sobre el mestizaje, inicia con el primer periodo que estudiarás en
las siguientes sesiones: el posclásico.
Su duración se estima en poco más de 600 años, pues abarca del 900 al
1521 de nuestra era. Se caracterizó por la intensa competencia militar entre
los distintos pueblos mesoamericanos. En un primer momento destacó la cultura
tolteca que ejerció una importante influencia cultural y, después de su
declive, destacaron, entre los siglos XIV y XVI, los mexicas, quienes fundaron
en 1325 la ciudad de Tenochtitlan, desde donde ejercieron y expandieron un
control político y económico, a través del cobro de tributos.
Otras culturas que se
desarrollaron durante este periodo fueron: la totonaca, cempoalteca, purépecha
y tlaxcalteca.
Pese a que cada pueblo tenía
sus particularidades que lo hacían diferente al resto, compartieron rasgos
comunes. Algo que todas las culturas mesoamericanas compartieron fue una
alimentación basada en el maíz, el frijol y la calabaza; una escritura
pictográfica; la construcción de pirámides de uso ceremonial; prácticas
rituales como el juego de pelota; una religión politeísta; el uso de
calendarios y sociedades jerarquizadas. Así como el comercio y el intercambio
de productos.
Algo que, seguramente, no
compartían era el idioma, pues se sabe que se hablaban muchas lenguas distintas
en este territorio, como aún sucede en muchas regiones México.
Aunque nuestro pasado
indígena lo conforman muchas y diferentes culturas, estos elementos eran compartidos
por la gran mayoría de ellas. También, cada cultura manifestaba su identidad
por medio de expresiones artísticas particulares, por su lengua, las
características de sus ciudades, la manera de desarrollarse con su entorno, la
región que habitaron y la duración de sus procesos de desarrollo.
Revisando la
temporalidad del posclásico, se puede decir que, con la invasión y conquista de
México-Tenochtitlan, en 1521, inició lo que conocemos como la colonia.
Aunque este periodo tiene
como antecedente los viajes de exploración de portugueses y españoles quienes
buscaban nuevas rutas comerciales con Asia. Entre esos viajes se encuentran los
de Cristóbal Colón, quien exploró el Caribe, y desde ahí se embarcaron las
primeras expediciones a nuestro territorio, en 1517, por Francisco Hernández de
Córdoba, en 1518, por Juan de Grijalva; y en 1519, la de Hernán Cortés, todas
motivadas por la búsqueda de riqueza y localización de metales preciosos.
El proceso de invasión y
conquista se desarrolló en varios momentos, desde el arribo de Hernán Cortés,
en 1519, hasta la caída de México-Tenochtitlan, en 1521. Esto,
independientemente de que muchas culturas indígenas continuaran resistiendo,
incluso por siglos.
Por el contrario, en zonas
alejadas de los principales centros, y donde los naturales carecían de
estructuras políticas, los españoles tuvieron muchos problemas para someter a
sus pobladores.
Para comprender cómo la
conquista y el proceso de colonización no se dieron de la misma forma en
nuestro actual territorio, observa el siguiente video.
UNA CONQUISTA DE
LARGA DURACIÓN.
https://www.youtube.com/watch?v=M4yiIPAhfE0&t=73s
El periodo de la Colonia
comienza con la caída de México-Tenochtitlan, pues a partir de ese momento la
corona española se apropió de este territorio como una de sus colonias, y le
impusieron el nombre de Nueva España, hasta que culminó el proceso de
Independencia en 1821, es decir tuvo una duración de tres siglos.
En muchos casos los
españoles aprovecharon las estructuras y formas de organización que ya
existían, lo que ayudó a que al inicio la vida política, económica y social no
se viera tan modificada, lo que les facilitó a su vez el control y dominio del
territorio.
En el aspecto político, el
año de 1535 es muy importante, pues en ese momento arribó a este territorio el
primer virrey, que era el representante del rey español en tierras americanas.
A partir de ese momento comienza el periodo que conocemos como virreinato.
Sin embargo, no se puede
negar que, como resultado de la conquista, tanto militar como espiritual, y
posteriormente con el virreinato, se dieron grandes cambios en todos los
aspectos de la vida y de aquellas sociedades que antes habitaron lo que los
especialistas llaman Mesoamérica.
En el aspecto económico
además de la agricultura, la minería mantuvo la primacía, con la explotación de
yacimientos, principalmente de plata. El comercio se desarrolló de forma
global, algunos productos que nuestro territorio exportó al mundo fueron: el
cacao, el jitomate, el tabaco, el añil y la grana cochinilla. Además, se
incorporaron otras actividades económicas como la ganadería.
La incorporación de ganado
también se refleja en el cambio de alimentación de los habitantes, además de la
carne de res y de cerdo, se introdujeron otros productos como el trigo, el
vino, los lácteos, los aceites y la caña de azúcar.
Incluso el propio paisaje se
transformó, muchas tierras que antes eran sólo para el cultivo pasaron a
convertirse en pastizales para el ganado y la cría de animales domésticos.
También las ciudades
cambiaron, las capitales indígenas se caracterizaban por tener pirámides y
centros ceremoniales, pasaron a convertirse en ciudades cuya principal característica
fueron las Iglesias y edificios de gobierno. Además de la aparición de
propiedad de rancheros y haciendas que modificaron las relaciones de las
comunidades con los recursos naturales.
Al inicio de la colonización
se vivió una “catástrofe demográfica.
Esto derivado, principalmente, por las epidemias,
primero de la viruela y después de la tosferina, también de la tifoidea, y
tiempo después el cólera. Sumado a la extenuante carga de trabajo. Este
despoblamiento, generó que se trajera mano de obra para trabajar en las minas y
en los campos, e inició así, un comercio de esclavos africanos. De acuerdo con
la historiadora Gisela Von Wobeser, antes de la invasión de los españoles había
11 millones de habitantes, cien años después, habían sobrevivido un millón
quinientos mil. Es decir, una pérdida entre el 85 y 90% de la población
originaria.
Para tener un panorama de
estos periodos, observa el siguiente vídeo.
DEL POSCLÁSICO A
MEDIADOS DEL SIGLO XVIII.
https://www.youtube.com/watch?v=zoTvnDShgKc
Finalmente, durante la
colonia, que se comprende del 1521 al 1821 sucedieron cambios políticos,
económicos, sociales y culturales. Se impuso el virreinato como forma de
gobierno, que se caracterizó por la presencia de un enviado o representante del
rey en el territorio, lo que implicaba un mayor control de todos los asuntos
políticos y económicos. En lo económico la minería se volvió la actividad más
importante del periodo novohispano. El comercio permitió el intercambio entre
América y Europa, incluso otros continentes como Asia. Desde productos de
consumo alimenticio hasta de uso para la vida cotidiana. También es relevante mencionar que se dio el
proceso de mestizaje, tanto étnico como cultural.
Has concluido esta sesión.
Si deseas saber más del tema, puedes consultar tu libro de texto de segundo de
secundaria.
MIÉRCOLES 27 DE ENERO
TEMA: REPASO DEL POSCLÁSICO
Aprendizaje
esperado: Aprende e identifica los rasgos más importantes del
posclásico, al comparar las ciudades de Tula y Chichén Itzá; además, reconoce
el papel de la militarización en las sociedades del periodo.
Énfasis: Identificar
el periodo Posclásico (900-1521) y su división cronológica en temprano y
tardío.
En esta sesión, estudiarás
el periodo posclásico, identificarás cómo se ha dividido, así como las
características que tuvo y las culturas que aparecieron en cada uno.
Recuerda que las culturas mesoamericanas se
fueron sucediendo unas a otras dentro de los llamados horizontes culturales que
son el Preclásico, Clásico y Posclásico.
A continuación, observa el
siguiente video donde podrás repasar lo ocurrido en Mesoamérica entre el año
650 y el 900 de nuestra era, fechas que marcan el final del periodo clásico y
que dan paso al periodo posclásico que comenzarás a estudiar en esta sesión.
SALA TOLTECA Y EL
EPICLÁSICO. INAH.
https://www.youtube.com/watch?v=C2-xQFN4jfY
El horizonte cultural
posclásico se extendió desde el año 900 hasta el año de 1521 de nuestra era,
fecha en la que los españoles y sus aliados indígenas invadieron y conquistaron
la ciudad de Mexico-Tenochtitlan, capital de la cultura mexica.
Entre estas dos fechas
aparecieron y se desarrollaron en la región de Mesoamérica diferentes culturas
con características particulares, que compartieron ciertos rasgos que pueden
considerarse comunes a todo el periodo.
Un primer elemento que hay
que tener presente sobre el posclásico es que, durante este, la extensión
geográfica de Mesoamérica se redujo en el norte, posiblemente a causa de
variaciones climáticas. En siguiente mapa, podrás notar la región norte de la
que se habla, identificada con color morado.
Debido a esta situación
muchos pueblos, sedentarios o seminómadas que vivían en la frontera con
Aridoamérica se vieron obligados a emprender continuamente migraciones hacia el
centro de Mesoamérica en busca de mejores tierras. Entre ellos había grupos
nahuas o purépechas, quienes recibieron el apelativo de chichimecas.
Estos grupos, una vez
asentados terminaron mezclándose con las poblaciones herederas de la cultura
teotihuacana o de otras ciudades del periodo clásico, justo son estas
migraciones de las que hablan las lecturas del inicio de la sesión.
Estos nuevos grupos, en los
que la figura del guerrero tenía un lugar central, influyeron de manera
fundamental en la elevación de la importancia de los aspectos militares dentro
de las sociedades mesoamericanas, alcanzando nuevas dimensiones. Al respecto el
libro “La Nueva Historia Mínima de México Ilustrada”, señala:
“La situación de conflicto
permanente que caracterizó a la etapa posteotihuacana y la beligerancia de los
advenedizos norteños se sumaron para situar a la guerra en el centro de la vida
pública de las ciudades del Posclásico. Los guerreros aparecen investidos de
atributos religiosos; las batallas se emprenden en nombre de los dioses, y los
sacrificios humanos que se practican después de la contienda se conciben como
necesarios para el funcionamiento del orden cósmico. La imagen y los valores
del guerrero llegaron a tener un reconocimiento social sin precedentes.”
Gracias a esto, se puede
hablar de la aparición en Mesoamérica de estados militaristas que buscaban su
expansión por medio de la guerra y donde la máxima figura política y religiosa
también se convertía en el principal comandante militar.
La guerra y la violencia se
trasladó de manera evidente al ámbito religioso, donde la importancia de los
sacrificios humanos en los rituales públicos se incrementó mucho, además de
hacerse muy popular la construcción del tzompantli, herencia proveniente de los
pueblos chichimecas del norte de Mesoamérica.
Siguiendo con el tema
religioso, es importante decir que, aunque se mantuvo una gran diversidad de
deidades entre las diversas culturas del periodo, se puede observar la
popularización de la figura de Quetzalcóatl, la serpiente emplumada o serpiente
preciosa, ya que se sabe de su presencia entre los pueblos del centro de
México, pero también entre los mayas donde es llamado Kukulcan o entre los
mixtecos donde recibe el nombre de Coo Dzahui.
A pesar de la prevalencia de
la guerra, las ciudades del posclásico también buscaron otros medios para
resolver sus conflictos y estabilizar sus regiones, razón por la cual se
incrementó el establecimiento de alianzas y acuerdos diplomáticos. Algunas de
las alianzas más conocidas se llevaron a cabo entre tres ciudades, como es el
caso de la Excan Tlatoloyan o Triple Alianza entre Tenochtitlan, Tacuba y
Texcoco; la alianza de las tres ciudades purépechas de Tzintzuntzan e Ihuatzio
o la alianza entre las ciudades mayas de Uxmal, Mayapan y Chichen Itzá.
No obstante, a los cambios
ocurridos durante este periodo, la base de la economía siguió siendo la
agricultura, al tiempo que los productos mesoamericanos del posclásico
continuaron siendo los mismos que los producidos por sus antecesores: maíz,
frijol, calabaza, chile, tomate, chía, amaranto, maguey, algodón, obsidiana,
cerámica, entre otros.
Otra actividad que se
mantuvo fue el comercio. Y es que, aunque al principio del periodo los
movimientos de población y la decadencia de las grandes ciudades generó una
caída de esta actividad, pronto las redes comerciales recuperaron su
importancia como un elemento de contacto y cohesión entre los pueblos que
habitaban la región mesoamericana.
A pesar de estas
similitudes, los especialistas han decidido dividir el periodo posclásico en
dos partes, cada una caracterizada por el surgimiento, esplendor y desaparición
de la cultura tolteca y la mexica.
EN PRIMER LUGAR,
SE TIENE EL POSCLÁSICO TEMPRANO.
Comienza en el año 900. Este
periodo se caracteriza por el surgimiento y hegemonía de la cultura tolteca,
con sede en la ciudad de Tula, localizada en lo que ahora es el estado de
Hidalgo. Será también la caída de Tula cerca del 1200, posiblemente en medio de
graves conflictos, lo que marca el fin del Posclásico temprano.
LA SEGUNDA PARTE
DEL PERIODO POSCLÁSICO HA SIDO DENOMINADO POSCLÁSICO TARDÍO.
Se ubica entre los años 1200 y
el 1521 de nuestra era. Esta etapa está caracterizada por el nacimiento de una
de las entidades políticas más complejas del México prehispánico la Excan
Tlatoloyan o Triple Alianza.
Esta alianza, liderada por
Tenochtitlan, alcanzaría a expandirse de manera importante dentro del panorama
mesoamericano, a través del sometimiento de otros pueblos y el cobro de
tributos. Los purépechas y algunos
señoríos, como los tlaxcaltecas se mantuvieron independientes pese a los
constantes intentos de sometimiento. Las confrontaciones entre los pueblos del
posclásico serán un aspecto fundamental ante la llegada e invasión de los
españoles
Para complementar la
información sobre las guerras y el pago de tributos durante este periodo,
observa el siguiente video.
GUERRA Y TRIBUTO.
INAH.
https://www.youtube.com/watch?v=f401gMAP_vA
Es importante no perder de
vista que al mismo tiempo que se desarrollaba la cultura tolteca o la mexica
hubo otras culturas que coexistieron con ellas de manera más o menos
independiente, entre ellas: la mixteca, totonaca, cempoalteca, purépecha y
tlaxcalteca.
Para profundizar en lo
anterior, observa el siguiente video.
UN MOSAICO DE
REINOS.
https://www.youtube.com/watch?v=sp6Q213V8E4
Has finalizado. En las
siguientes sesiones, conocerás detalladamente algunas de las culturas que se
desarrollaron durante el periodo del Posclásico. Su duración se estima en poco
más de 600 años, pues abarca del 900 al 1521 de nuestra era. Se caracterizó por
la intensa competencia militar entre los distintos pueblos mesoamericanos. En
un primer momento destacó la cultura tolteca que ejerció una importante
influencia cultural, y después de su declive, destacaron, entre los siglos XIV
y XVI, los mexicas.
Has concluido esta sesión. Si deseas saber más del tema, puedes consultar tu libro de texto de segundo de secundaria.
En
la semana 20 revisaste el posclásico y te acercas al proceso de Conquista. Ahora
considera lo siguiente: en la enseñanza-aprendizaje de la HISTORIA, las
imágenes desempeñan un papel fundamental.
Desde
el principio de tus días has observado imágenes que según tus conocimientos las
mismas han tomado un nuevo significado. Las imágenes nos dicen algo, las
imágenes tienen por objeto comunicar.
Pero si no sabemos leerlas no nos dicen nada. Son irremediablemente
mudas.
Indicaciones
generales para analizar una imagen:
1. Observar todo los detalles de la imagen.
2. Identificar personajes, lugares,
protagonistas y símbolos.
3. Identificar actitudes.
4. Identificar temática: hito o proceso
graficado.
5. Identificar intención de la imagen.
6. Averiguar y referirse contexto
histórico, conceptos fundamentales, hitos, procesos.
7. incorporar comparaciones con información
de otras fuentes (escritas y/o iconográficas).
ACTIVIDAD
SEMANA 20
1. Utilizando
el análisis iconográfico como una valiosa herramienta para el estudio de la
Historia, analiza la siguiente imagen.
2. Para
ello sigue las indicaciones generales para analizar una imagen y contesta lo siguiente.
1. ¿A qué proceso de la Historia hace
referencia la imagen?
2. ¿Quiénes son los personajes que se observan
en la imagen?
3. ¿Qué significado tiene la la figura que
envuelve a Hernán Cortés de Monroy y Pizarro Altamirano I?
4. ¿Qué
observas al fondo de la imagen?
5. ¿Qué presentes ofrecen a Cortés y por
qué piensas que lo realizaron?
6. ¿Dónde podrías ubicar el lugar que se
representa en la imagen?
7. ¿Cuál
es el nombre actual del lugar representado en la imagen?
8. ¿Quién es la mujer que se aprecia en la
imagen y cuál fue su participación en este proceso de la Historia?
9. Ahora expresa algún comentario sobre la
presente actividad.
¡Buen trabajo!
Gracias por tu esfuerzo
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